Vienes a conocer España y todo mundo te recomienda que no pierdas oportunidad de comerte unas buenas tapas. No sólo te dicen que son deliciosas, también que son muy fáciles de encontrar y por si fuera poco, que en muchos lugares ni siquiera las cobran: son gratis.
Pero a todo esto, ¿qué son las tapas? Con la descripción podrías pensar que son lo que en otros sitios llaman botana (México), entremeses, picoteo (Chile), picada (Argentina) y la idea es bastante parecida. Es decir, se trata de alimentos en pequeñas porciones que acompañan a una bebida y que suelen consumirse antes de un plato principal, como quién dice para abrir el apetito.
Sin embargo, la peculiaridad de las tapas españolas radica tanto en la leyenda de su origen, como en el culto gastronómico que se les rinde hoy en día, al grado de que existen incluso locales especializados en tapas.
Pero vayamos por partes. ¿De dónde viene el nombre de tapas? Se dice que un monarca europeo (en algunas versiones se trata de Alfonso X y en otras de Alfonso XIII) había decretado que todos los mesones y tabernas sirvieran comida junto con el vino, para evitar que éste se le subiera a la cabeza los clientes del lugar. Así, junto a la copa de vino solía servirse una loncha de jamón, una porción de queso o una rebanada de chorizo o embutido similar. Por aquellos tiempos el asunto de la higiene no era precisamente de lo más cuidado, por lo que en las tabernas solían abundar las moscas y otros insectos voladores que con frecuencia terminaban dentro del vaso de vino para disgusto de quien lo bebía (sobretodo si se percataba de la invasión al sentir el insecto en la boca) . Un día el rey, al visitar una taberna ordenó una copa de vino y el camarero tuvo la ocurrencia de colocar una loncha de jamón a modo de tapa para evitar que la bebida se contaminara. Al rey le encantó la idea y pidió que las demás bebidas se las sirvieran tapadas.
Actualmente las tapas no son sólo embutidos y quesos. Abundan también las aceitunas, los frutos secos, trozos de sardinas, anchoas e incluso porciones tamaño bocado de guisos cuya presentación es de lo más cuidadosa.